Después de revelarme que el sustituto del Gobernador Cuitláhuac García en Veracruz será el Senador Ricardo Ahued Bardahuil, (en caso de que sus yerros continúen disminuyendo drásticamente los bonos de Morena en el estado), mi fuente de traje gris en Palacio Nacional me confió otra inquietud del círculo cercano al Presidente.
“¿Y qué pasa si Veracruz no aguanta dos años completos con Cuitláhuac García?, ¿estamos dispuestos a que los veracruzanos crean que no sabemos gobernar?, ¿nos comemos el costo político de esperar 18 meses más esperanzados en que se despabile el Gobernador?”
Fueron algunas de las preguntas que recibió López Obrador en la última junta sobre la situación en Veracruz, posterior a palomear el relevo de Cuitláhuac García si en dos años de mandato no “levanta”. En esa reunión se discutieron también las situaciones en Morelos, CDMX y Chiapas.
Me cuentan que en esa mesa de trabajo, misma que congregó al Presidente y 5 personas más, se contempló la idea de remover a Cuitláhuac García en menos de 2 años, aunque eso implicara convocar por ley a un elección extraordinaria en el estado.
“Ganaríamos en Veracruz de nuevo, a pesar de Cuitláhuac García”, dijo el hombre sentado a la derecha de AMLO. “Quizá no obtendríamos el mismo número de votos con los que vencimos, pero de que ganamos, por supuesto que ganamos; cuestión de operar bien la zona desde acá, dejando fuera a todos los de allá”.
“Nuestro mejor activo en Veracruz eres tú, Andrés Manuel, a pesar de Cuitláhuac García”, dijeron del otro lado de la mesa. “Pero opino lo contrario, no debemos tomar riesgos, si competimos otra vez con panistas y priístas allá por la Gubernatura, podríamos quedarnos con las manos vacías”.
El Presidente asintió. Instruyó ayudar al Gobernador de Veracruz “cueste lo que cueste”, hasta que cumpla dos años de mandato. AMLO sigue creyendo que en ese periodo, su leal amigo levantará el vuelo, optimismo que no comparte su equipo cercano de asesores.
“Mira, Alejandro, Cuitláhuac es un hombre honesto, incapaz de tomar un centavo, pero no podemos asegurar que todos sus colaboradores cercanos sean iguales, esa responsabilidad deberá asumirla el propio Gobernador”.
Varios cercanos a AMLO en Palacio Nacional creen que Cuitláhuac García quiere gobernar bien, pero simplemente “no le da para más; necesita ayuda”, me dijeron.